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Martes, 26 de Noviembre de 2024
Nacional   -   Febrero 10, 2011

No me arrepiento de las alianzas: Ortega

el chiltepin

Ciudad de México a Jueves 10 de febrero de 2011.- Jesús Ortega, va directo: “Ni hoy ni nunca me voy a arrepentir de las alianzas conformadas con el Partido Acción Nacional”. Después, refuerza: “Cuauhtémoc Cárdenas y Andrés Manuel López Obrador hicieron alianzas con el PAN y con sectores del PRI y no perdieron principios”.

Al entrar en la recta final de su liderazgo en el PRD, afirma que sus pactos electorales con la derecha fueron coyunturales y no estratégicos hacia 2012, y aclara que por sí solo el perredismo será factor en la próxima contienda presidencial.

En entrevista con EL UNIVERSAL, el aguascalentense advierte que López Obrador ha asumido posiciones “poco democráticas y conservadoras”, y ante la visión del ingeniero Cárdenas de que el PRD no se podrá unir, advierte que es una visión “conservadora” pensar en un partido de izquierda monolítico.

Ortega hace un breve balance de su gestión, que arrancó en medio de la convulsión interna en el sol azteca por el conflicto con Alejandro Encinas. Subraya que detuvo la caída del PRD después del conflicto postelectoral de 2012 y lo reposicionó con más triunfos a nivel nacional.

¿Cuál es el balance que hace de su liderazgo al entrar en su recta final?

Todo mundo con elemental honradez intelectual reconocerá que había muchas adversidades. Una gran adversidad era el conflicto interno en el PRD, otra era que el PRD venía en una situación de declive electoral por los conflictos postelectorales de 2006. Si se observan los resultados de 2007-2008, tenemos una caída espectacular; yo traté de revertir la caída en 2009 y creo que lo estábamos logrando, pero el michoacanazo y Juanito impactaron severamente a nivel nacional.

Llegó 2010.

Esas adversidades fueron grandes y el resultado de 2009 no fue bueno, y en 2010 trazamos una estrategia de buscar frentes amplios opositores con candidaturas ciudadanas. No trazamos esa estrategia inicialmente con una reunión bipartidista, esa estrategia la trazamos antes, para poder enfrentar al priísmo, especialmente en algunos estados.

¿Las alianzas son la respuesta a la picada en que iba el PRD?

Había que corregir los malos resultados de 2009 y había que empezar un ascenso en 2010 que continuara en 2011, y la estrategia dio resultados. La estrategia se concibió para Guerrero, teníamos que recuperar Acapulco y mantener el gobierno con un candidato como Armando Chavarría. Y se presentó la circunstancia en Oaxaca y entonces dijimos que había condiciones y circunstancias para vencer al cacicazgo de Ulises (Ruiz), y prosperó aun con la negativa que había en el gobierno de postular a Gabino Cué, y de las resistencias a nivel federal para hacer una alianza.

Hubo más coaliciones.

Se vencieron las resistencias, pero como eran 12 elecciones de una sola ocasión, entonces vimos las posibilidades de otras entidades y se presentaron las coyunturas: Sinaloa, Puebla; no teníamos contemplada la condición de Durango, pero se presenta una coyuntura propicia de Rosas Aispuro, apoyado no sólo por priístas. En Hidalgo, con Xóchitl Gálvez, a mi juicio ganamos. Las amplias alianzas son resultados de coyunturas, no es una visión de estrategia hacia el 2012.

Tienen el fin de reposicionar al PRD.

Desde luego, y lo logramos.

¿Se arrepiente de las alianzas que concretó en su gestión?

No me arrepiento. Lo digo hoy y lo diré después: a los resultados tangibles y concretos me remito, no a las especulaciones. Crecimos en el número de posiciones y el PRD se reposicionó: creció en número de alcaldías y diputados a nivel nacional, logramos parar la caída y empezar un ascenso y no perdimos ninguna convicción y ningún principio.

Ahí es donde lo critican.

Ahí es donde piensan que se pueden perder principios haciendo alianzas de esta naturaleza. Pero el ingeniero (Cuauhtémoc) Cárdenas no perdió principios cuando hicimos la alianza con el PAN en San Luis Potosí; Andrés Manuel (López Obrador) no perdió principios cuando hicimos alianzas con sectores del PRI. Yo no inicié las alianzas con el PAN, primero las hubo en San Luis, Durango, Coahuila, Nayarit, Oaxaca, Chiapas. ¿Desde cuándo el PAN se convirtió en un partido de derecha, desde que yo soy presidente del partido? Esa es una ridiculez. Andrés dice que el PAN se constituyó para combatir al general (Lázaro) Cárdenas, pues sí, pero, ¿por qué no recordó eso cuando hicimos alianza con Salvador Nava, que era panista, y por qué no recordarlo cuando celebró el triunfo de Pablo Salazar o de Toño Echevarría?

¿Insiste en que hubo fraude en 2006?

Sí, creo que hubo fraude, sigo pensando que hubo fraude, irregularidades.

¿Entonces por qué aliarse con un partido que, dicen ustedes, cometió fraude?

Insisto en lo de la coyuntura: si se ve como una cuestión de estrategia, no hay justificación, pero si se ve en específico Oaxaca, se ve que no se traicionó ningún principio ni nos hace olvidar lo del fraude conjuntar una gran alianza de partidos políticos para terminar con Ulises Ruiz, o en Puebla. Desde luego que hubo fraude, pero hay que remontar el pasado y ver las nuevas condiciones y las nuevas coyunturas.

El PRD ganó en alianza tres estados y retuvo Guerrero. Pero ninguno de los ganadores fue formado en su partido.

Hay quienes ganan con origen del PRD y otros que ganan con origen en las alianzas. ¿Por qué ser críticos de victorias que son legítimas? Le ponen un pelo a la sopa al decir que el ganador no es del PRD. El PRD no se hizo para que sus militantes se conviertan necesariamente en gobernantes, se hizo para ponerse al servicio de la gente.

Pero tienen un proyecto político y social…

El principal es ponerse al servicio de la gente. Cuando un partido no ve el objetivo de estar al servicio de la gente, crea intereses propios.

Algunos candidatos eran muy priístas.

Andrés (Manuel López Obrador) era priísta, fue presidente del PRI en Tabasco, y alguien señaló malo que fuera nuestro candidato en Tabasco, y era del PRI, nadie lo criticó porque era candidato contra un cacicazgo que hoy sigue gobernando ese estado, el cacicazgo pese a las grandes luchas de Andrés.

¿Qué le deja su liderazgo al país?

No soy un político ortodoxo. Siempre he peleado porque en la izquierda dejemos las visiones doctrinarias, dogmáticas, fanáticas y absolutistas. Traté de dejar atrás esas visiones dogmáticas de la política mexicana: el caudillismo, que depende de personajes. Yo me opongo a eso. La democracia no congenia con el caudillismo. Traté de hacer una presidencia con ideas propias.

¿Y al partido?

En 20 años nadie se había atrevido a enfrentar al viejo padrón, era una especie de sacrilegio, como si se atentara contra el Santo Grial.

¿Le alcanzó para poner orden en las corrientes de opinión del PRD?

No, pero pusimos condiciones y reglas para hacer corrientes de opinión.

¿Se desdibujó la izquierda?

No, más bien estamos dejando esa visión de la ortodoxia, para algunos desdibujarnos es dejar de ser lo que éramos, pero, ¿no debemos dejar de ser lo que éramos? Yo creo que sí. ¿En la marginalidad política aunque manteniendo doctrinas, dogmas que no principios?, pregunto.

Pero lo acusan de haber violentado algunos principios.

¿Qué principios, los de la vieja izquierda, de los del viejo nacionalismo revolucionario, los del viejo priísmo? Los principios no son de una vez, ni para siempre. Yo hablo de que no violentamos los principios democráticos.

¿Puso al PRD rumbo a la modernización de la izquierda?

Contribuimos a ese propósito. La izquierda mexicana es más libertaria y democrática.

¿Obrador fue sombra de su presidencia?

Pues sí. Es una visión conservadora.

¿Tiene visión conservadora?

Sí, en muchos sentidos tiene una visión conservadora.

¿Por ejemplo?

Tiene una visión conservadora en la idea de la democracia. Cuando dice que Yeidckol (Polevnsky) va a ser candidata, ¿es una visión democrática o conservadora? A mí me parece que es conservadora cuando alguien decide quién va a ser el candidato al margen de la visión de la ciudadanía o de la opinión del partido. Cuando se recurre a la consulta ciudadana para unos casos y en otros las desecha, es inconsecuente.

Cárdenas dice que no existe posibilidad de unir al PRD.

Está contra las corrientes. Pero el ingeniero era miembro de la Corriente Democrática del PRI. A través de una corriente empezó a dar una lucha al interior del PRI y luego, cuando formamos el PRD, encabezaba a un grupo de militantes. La izquierda no es monolítica, es diversa, lo monolítico existe en la derecha. Exigir monolitismo es una posición extremadamente conservadora, que sólo exista una opinión y desechar otras es regresivo.