El candidato demócrata a la Presidencia de Estados Unidos, Joe Biden, arrebató Arizona, uno de los estados clave en las elecciones del martes, al actual presidente, Donald Trump, que venció aquí en 2016, según proyecciones de Associated Press, agencia de referencia en cuanto a resultados electorales, y de los grandes medios estadounidenses.

Con este resultado proyectado por AP y la cadena Fox News, la emisora NPR y el portal Politico, Biden suma 11 delegados más y se sitúa con 236 compromisarios en el Colegio Electoral, frente a los 213 que ha sumado Trump en su objetivo común de llegar a los 270 que dan la victoria.

Con la histórica victoria de Biden en Arizona –donde solo una vez en los últimos 72 años se ha votado un candidato presidencial demócrata–, el presidente ve muy reducidas sus opciones de ganar la reelección.

Aún ganando los estados que parece tener asegurados pero en los que todavía no hay un resultado claro, como Georgia y Carolina del Norte, Trump ahora debe ganar en Wisconsin, Michigan y Pensilvania, que tiene el feudo demócrata de Philadelphia y donde hay un gran número de votos por correo pendientes todavía de contar.

Antes de la victoria de Clinton, Arizona no había votado por un demócrata desde Harry Truman en 1948, lo que evidencia que se trata de un estado tradicionalmente muy conservador.

La campaña de Biden se había centrado en Arizona como parte de su mapa de campo de batalla ampliado a través del llamado “cinturón del sol”, en referencia a los estados sureños.

Su decisión se basó en cambios demográficos que favorecían una victoria azul: nuevos residentes y una realineación lejos de los republicanos entre los votantes suburbanos clave.