Al actualizar sus proyecciones sobre el COVID-19, el Instituto de Métricas y Evaluaciones de Salud de la Universidad de Washington prevé que para el 1 de diciembre México sume 130 mil 387 defunciones.

Con el impacto positivo del uso universal de cubrebocas se registrarían 121 mil 331 decesos, pero con el relajamiento de las medidas se tendrían 177 mil 601 víctimas.

Según sus cifras, las muertes diarias en junio eran aproximadamente 500, pero fueron subiendo a casi 700. México debe aspirar a que las nuevas olas de COVID-19 no sean de la misma magnitud que la primera, advirtió la Secretaría de Salud (Ssa) al dar a conocer ayer que el país alcanzó 60 mil 254 defunciones por el SARS-CoV-2.

Ricardo Cortés Alcalá, director de Promoción de la Salud, dijo que es inevitable un rebrote de contagios y que estamos ante una pandemia larga, pero llamó a la sociedad a trabajar en equipo con las autoridades y a no relajar medidas de higiene y sana distancia.

“Es evitable un rebrote, creo que sí, lo esperamos; también estamos ante una epidemia larga, vamos a ir por pequeñas olas que no deben ser del tamaño de la anterior, debemos aspirar a que las nuevas sean menores hasta que se dejen de presentar y esperemos que para cuando suceda ya estemos aprendiendo como sociedad a mantener las medidas sanitarias, porque va a empezar la temporada de influenza y no sabemos si se juntarán los virus”, mencionó.

México rebasó ayer el escenario “catastrófico” de 60 mil muertes por COVID-19 que predijo el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell.