La pandemia del coronavirus SARS-CoV-2 ha llevado al mundo a una crisis laboral “sin precedentes”, consideró el jefe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Guy Ryder, quien afirmó que varios líderes mundiales pidieron una estrategia integral para contrarrestar el impacto de la COVID-19.

"Seamos claros: no se trata de elegir entre la salud o el empleo y la economía. Están interrelacionados: o ganamos en todos los frentes o fracasamos en todos los frentes", dijo el secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, en una cumbre de la OIT en la que participaron decenas de jefes de Estado y de gobierno a través de mensajes grabados.

El jefe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo en la cumbre que el mundo tiene el deber especial de proteger a los millones de trabajadores de la salud que están en la primera línea de la crisis y que sufren cada vez más casos de infección y muertes.

"Juntos tenemos el deber de proteger a los que nos protegen", dijo.

Las perspectivas del mercado laboral mundial en la segunda mitad de 2020 son "muy inciertas" y la recuperación prevista no será suficiente para que el empleo vuelva a los niveles anteriores a la pandemia este año, destacó la OIT la semana pasada.

La agencia de la ONU indicó que la disminución de las horas de trabajo a nivel mundial en la primera mitad del año fue "significativamente peor de lo que se había estimado anteriormente".