El huracán María se fortaleció este lunes a categoría 2 en el Caribe rumbo a las islas de Sotavento, recién golpeadas por el huracán Irma, y una alerta de huracán fue emitida para Puerto Rico, a donde se esperan sus efectos el próximo miércoles.

El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (CNH) indicó que María es un huracán categoría 2 en la escala Saffir-Simpson -de un máximo de cinco niveles- con vientos de 175 kilómetros por hora, y prevé que se intensifique a categoría 4 mientras se mueve hacia el oeste y cruza por el norte del Caribe esta semana.

A las 08:00 horas locales (12:00 GMT) el ojo del huracán se encontraba a 195 kilómetros al este de la isla de Dominica y se espera que comience a golpear desde este lunes las islas de Sotavento.

Un aviso de huracán está en efecto para las islas de Guadalupe, Dominica, San Cristóbal y Nevis, Monserrat, Martinica y Santa Lucía.

Además, un aviso de tormenta tropical para Antigua y Barbuda, Sab, San Eustatius y San Martín, mientras que la vigilancia de huracán es para Puerto Rico, Vieques y Culebra, así como las islas Vírgenes estadunidenses y británicas.

A diferencia de Irma, María es una tormenta compacta con vientos que se extienden a sólo 24 kilómetros desde su centro. María alcanzaba 128 kilómetros y sus vientos de tormenta eran de 168 kilómetros.

María se formó mucho más al este, por lo que no ha tenido tiempo de someterse a los reemplazos de la pared del ojo que construyó Irma, un monstruoso huracán jamás registrado en el Atlántico que destruyó varias islas caribeñas y la costa de Florida.

Sin embargo, el tamaño compacto de María también hace que sea más impredecible cuando se trata de la intensificación.

En Dominica, el primer ministro Roosevelt Skerrit advirtió a los residentes no tomar a la ligera a María, sólo porque Irma los esquivó la vez pasada. Reportes de prensa indican que las autoridades de protección civil abrieron albergues y ordenaron a las escuelas y oficinas de gobierno cerrar el lunes.

En 2015, Dominica fue golpeada por la tormenta tropical Érika que provocó inundaciones y deslizamientos de tierra con al menos 20 muertos.

Todavía no está claro si María es una amenaza para la Florida o la costa de Estados Unidos. Un sistema de alta presión que está controlando la tormenta debe debilitarse más adelante y permitir que la tormenta gire hacia el noroeste y lo retire de Florida.

Se espera que el huracán José, actualmente frente a las costas de las Carolinas, juegue un papel en el debilitamiento de ese sistema de alta presión a finales de la semana a medida que se desplaza hacia el noreste.

El huracán José, de categoría 1, con vientos de 140 kilómetros por hora se encontraba la mañana del lunes a 440 kilómetros al este de Cabo Hateras, Carolina del Norte, y se esperaba que produjera “corrientes peligrosas” a lo largo de la costa noreste de Estados Unidos.

Una vigilancia de tormenta tropical fue emitida para la costa noreste estadunidense desde el sur desde en Delaware hasta el norte en Massachusetts.

Mientras que en el Atlántico oriental, la depresión tropical Lee ubicada a mil 710 kilómetros al oeste de las africanas islas de Cabo Verde se espera que se degrade a un remanente.