Los restos sin identificar de las 150 víctimas mortales del avionazo de Germanwings en Los Alpes fueron inhumados bajo una estela funeraria instalada cerca del lugar del accidente, informaron hoy fuentes oficiales francesas.

Los restos de las víctimas fueron enterrados “la noche pasada” en una “sepultura colectiva” en el pequeño memorial instalado tras el accidente, ubicado cerca del lugar en el que se desplomó el avión, en el poblado de Le Vernet, en el sureste de Francia, indicaron las fuentes.

“La autoridad pública decidió una sepultura colectiva en Vernet para los fragmentos humanos no identificados”, dijo el procurador de Marsella, Brice Robin, respecto a la inhumación que fue realizada sin testigos ni comunicada a la prensa.

Robin explicó que el lugar en el que fueron enterrados los restos fue elegido por su proximidad con la zona en la que cayó el Airbus A320, en un acto suicida del copiloto de la aerolínea alemana, filial de Lufthansa, Andreas Lubitz.

Este viernes se celebró una ceremonia interreligiosa en el lugar en la que participaron entre 200 y 300 personas, la mayoría familiares de las víctimas, informaron televisoras locales.

La ceremonia de homenaje está rodeada de fuertes medidas de seguridad para restringir el paso solo a los familiares de las víctimas.

Decenas de gendarmes fueron desplazados en la zona del memorial en donde se prohibió la circulación de vehículos.

Durante el acto, que comenzó minutos antes de las 15:00 horas locales (13:00 GMT), se colocaron coronas de flores.

Algunos habitantes de la zona se quejaron de las restricciones de acceso a la ceremonia y el bloqueo de la circulación a los poblados en donde sucedió el accidente.

“Respetamos su intimidad, pero se nos dejó de lado. Es una pena”, declaró una habitante a televisoras francesas sobre el acto, vetado a los medios.

“Hoy vivimos todavía con la emoción porque recibimos a muchos familiares. Esto nos trae recuerdos. Estamos emocionados”, dijo el alcalde Bernard Bartolini del poblado alpino de Prads-haute-belone, uno de los tres cercanos al lugar del avionazo.

“Nuestra vida volvió a su curso, pero comprendemos el dolor inmenso de las familias”, añadió el presidente del pequeño municipio, cuyos vecinos acogieron en sus casas a algunos de los familiares de los fallecidos en el accidente.

El percance tuvo lugar el 24 de marzo pasado durante el vuelo entre Barcelona, España, y Dusseldorf, Alemania, del aparato de Germanwings.

En el avionazo fallecieron los 150 ocupantes del aparato, la mayoría de nacionalidad alemana y española, aunque también dos ciudadanas mexicanas, entre otras víctimas.