La Bolsa de Valores de Tokio cerró hoy sus operaciones con desplome de mil 143.28 puntos, 7.32 por ciento, en el índice Nikkei 225, su mayor caída tras el tsunami de 2011, luego de conocerse datos preliminares de la actividad industrial china.

El índice de compras de gerentes sobre la actividad manufacturera en China se ubicó este mes en 49.6 puntos, cuatro décimas bajo las 50 unidades que separan expansión de contracción, lo que ocurre por vez primera desde el pasado octubre. A su vez el indicador que mide las nuevas órdenes de compras llegó a 49.5 enteros, la lectura más baja desde el pasado septiembre, lo que sugiere que la demanda interna china no es suficiente para reemplazar a la externa.

Las órdenes de exportación también se ubicaron bajo el nivel de 50 puntos, atribuido a la debilidad de la recuperación en Estados Unidos, la crisis de deuda en la Unión Europea y menos demanda proveniente de Corea del Sur y Taiwán. Se trató del más fuerte retroceso desde que cayó 10.55 por ciento, su tercera mayor caída de la historia, el 15 de marzo de 2011 tras la crisis nuclear en la planta de Fukushima, y que cerró cuatro sesiones continuas de ganancias.

Analistas indicaron que la caída también obedeció a que el sobrecalentamiento que estaba mostrado el mercado con sus cinco mil puntos de ganancia no había sido ajustado. Por último, contaron las palabras del presidente del banco de la Reserva Federal estadounidense, Ben Bernanke, quien dijo que si se mantiene la mejoría en el empleo, la política de flexibilidad monetaria podría llegar a su fin.