Los rescatistas de Florida, al sur de Estados Unidos, demolieron hoy la casa de un hombre tragado por la tierra el jueves en la ciudad de Tampa, tras descartar toda posibilidad de hallar el cuerpo de la víctima.

Imágenes en vivo de la televisora CNN mostraron momentos en que la vivienda de Jeff Bush, de 37 años de edad, era derribada en el barrio de Seffner ante los ojos de cientos de vecinos y curiosos.

Bush despareció cuando, mientras dormía, se abrió un agujero debajo de su cama y se tragó lo que había en la habitación.

"Simplemente no se ha podido localizar al señor Bush, y por esa razón se suspendieron las labores de rescate", dijo a los periodistas la víspera el administrador del condado de Hillsborough, Mike Merrill.

El funcionario explicó que los trabajadores estaban tratando con un "sumidero muy inusual", profundo, amplio y extremadamente inestable.

Según detalló, el agujero, de unos 20 pies de ancho y 50 a 60 pies de profundidad seguía creciendo, por lo que se decidió el derribo de la vivienda para saber hasta dónde se extendería el hueco.

De acuerdo con la televisora varias casas cercanas fueron evacuadas el viernes como medida de precaución.

El Departamento de Protección Ambiental de Florida afirmó que los sumideros son comunes en el estado, debido al lecho de roca caliza donde se asienta el territorio.

Aunque cada año se abren miles de agujeros en la tierra, al parecer pocos han tenido las características de este y tampoco ocasionaron víctimas.

El condado de Hillsborough, en la costa oeste floridana, forma parte de una zona conocida como "sinkhole alley" (callejón del sumidero), que aporta las dos terceras partes de las reclamaciones de seguros en ese estado relacionadas con hundimientos.