La Fiscalía General de Justicia del Estado ha iniciado una investigación para determinar si los restos calcinados que fueron encontrados en un basurero de Caborca corresponden a los de Erika Altamirano, la joven de 28 años que fue privada de la libertad el jueves.

En la colonia Palo Verde se localizó el vehículo calcinado de la víctima y en el interior los restos de la mujer que fue privada de la libertad en la carretera internacional entre Quiroz y Mora.

Por ello, expertos en genética del Laboratorio de Inteligencia Científica Forense (CIF) realizan comparativas de ADN de los restos óseos para determinar su identidad.

Personal de Servicios Periciales recolectó los restos calcinados, localizados en el interior de un vehículo incinerado, y realizó el traslado a las instalaciones del CIF en Hermosillo, además de tomar muestras de ADN con probables familiares.

Estos hechos han provocado indignación entre los pobladores de Caborca. Ayer, mujeres en vehículos arrojaron huevos contra el palacio municipal.