La directora de Salud Mental de Sonora, Leticia Amparano Gámez, afirmó que los niños afectados por “bullying” escolar no buscan atención profesional en el Centro Infantil de Desarrollo Neuroconductual (CIDEN) o en las unidades especializadas en trastornos mentales.

Entrevistada en el marco de la polémica generalizada por la agresión física que sufrió una niña en la primaria “José María Morelos”, de Hermosillo, la funcionaria estatal confirmó que solo 11 niños fueron atendidos por “bullying” en el CIDEN durante todo el 2012.

“En 2012, en un CIDEN con una población de 200 consultas diarias, el año pasado se reportaron 11 casos de bullying, o sea que no están acudiendo. Así fuera un solo caso de atención, pero no están acudiendo en la magnitud que se está viendo la situación”, lamentó.

Leticia Amparano Gámez dijo que el “bullying” afecta emocionalmente a los niños en edad escolar y los puede orillar incluso al suicidio si no es atendido por profesionales.

“Les afecta a nivel emocional en depresión, pierden el autoestima y la seguridad, pierden la posibilidad de enfrentar a sus pares para desarrollarse socialmente de una manera agradable, pierden la seguridad en sí mismos como personas. Después de una depresión severa, el bullying también puede matar, puede un niño decidir suicidarse”, comentó.

Agregó que uno de los problemas de salud mental más frecuentes en niños de edad escolar es el Trastorno por Déficit de Atención, o TDA, que afecta al 30% de los niños atendidos en el CIDEN y provoca un desabasto en la atención en el CIDEN y las unidades especializadas.

“No se da abasto. Aunque tenemos un doble turno y alrededor de 50 especialistas tenemos alrededor de 210 consultas diarias, es muy difícil, es prácticamente la única alternativa para los niños sonorenses. A parte tenemos unidades especializadas en trastornos mentales, pero no nos damos abasto”, reveló.