Atacan iglesias católicas en Nigeria
Abuya, Nigeria a 26 de diciembre de 2011.- Al menos 40 personas perdieron la vida y decenas resultaron heridas ayer en Nigeria a causa de cinco atentados de la secta islamista Boko Haram, tres de ellos contra templos cristianos en los que se celebraban los servicios religiosos de Navidad, lo que aumentó los temores de que busquen encender una guerra civil sectaria.
Boko Haram, que apunta a imponer la ley islámica sharia en todo el país, reconoció haber colocado las bombas, en la segunda Navidad consecutiva en que el grupo causa matanzas masivas con explosiones mortales en iglesias.
La iglesia de Santa Teresa ubicada en Madalla —una ciudad satélite a unos 40 kilómetros del centro de la capital nigeriana, Abuya— estaba llena de gente en el momento de la explosión. "Estábamos en la iglesia con mi familia cuando oímos la explosión. Simplemente corrí afuera", dijo a Reuters Timothy Onyekwere. "Ahora ni siquiera sé dónde están mis hijos ni mi esposa. No sé cuántos resultaron muertos, pero hubo muchos", agregó.
Horas después del estallido de la primera bomba, se informó de explosiones en la iglesia Montaña de Fuego y Milagros en Jos, una ciudad del centro del país, y en una iglesia en la ciudad nororiental de Gadaka, que dejó varios heridos. Un atacante suicida mató a ocho funcionarios del Servicio Estatal de Seguridad en otro ataque perpetrado en la ciudad nororiental de Damaturu, dijo la policía.
Varios cuerpos estaban muy mutilados, lo que hizo difícil su identificación. Un trabajador local de la Cruz Roja dijo que algunas familias habían enterrado de inmediato a sus familiares muertos, por lo que no está claro el número exacto de muertos ni de heridos.
Las fuerzas de seguridad y rescate acudieron al lugar y acordonaron la zona. La detonación dañó también muchos edificios aledaños.
El vocero de la Agencia Nacional de Manejo de Emergencias, Yushau Shuiab, dijo que se carecía de suficiente equipo médico y sobre todo ambulancias. Antes del ataque Madala era considerada una zona de pocas amenazas.
La policía cercó el área alrededor de la iglesia. Miles de jóvenes furiosos colocaron barricadas en llamas en la carretera que conduce desde Abuya hacia el norte mayormente musulmán de Nigeria. Los militares y la policía trataron de dispersarlos disparando gas lacrimógeno. "Estamos tan enojados", gritó Kingsley Ukpabi, mientras una fila de autos se acumulaba detrás de su barricada en llamas.
El presidente del país, Goodluck Jonathan, cristiano originario del sur, calificó el incidente de "desafortunado" y manifestó que los Boko Haram no durarán "para siempre".
Condena mundial
La Casa Blanca condenó "esta violencia sin sentido y trágica pérdida de vidas el día de Navidad".
"Hemos estado en contacto con funcionarios nigerianos sobre lo que inicialmente parecen haber sido actos terroristas y prometimos ayudarlos a llevar a la justicia a los responsables", dijo la Casa Blanca en un comunicado.
El Vaticano condenó en un comunicado esos hechos de violencia y los describió como una señal de "la crueldad y el odio absurdo y ciego" que no muestra respeto por la vida humana.
Los ataques fueron condenados también por varios otros países, incluyendo a Gran Bretaña, Francia e Italia.
El secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, manifestó ayer sus condolencias a los familiares de las víctimas y al pueblo nigeriano.
Antecedentes violentos
En vísperas de Navidad de 2010, la secta Boko Haram también lanzó una serie de ataques bomba alrededor de Jos, que dejaron 32 muertos y otras personas perecieron en ataques contra dos iglesias en el noreste.
La secta fue acusada de perpetrar decenas de ataques con bombas y tiroteos en el norte, y se ha adjudicado la responsabilidad de dos bombas en Abuya este año, incluido el primer ataque suicida de Nigeria en la sede de Naciones Unidas en agosto, donde murieron al menos 23 personas.
Grupos de derechos humanos dicen que más de 250 personas han muerto en ataques de Boko Haram desde julio de 2010.