Enero 3, 2011 / ElChiltepin > Nacional
Monterrey, Nuevo León a 03 de enero de 2011.- Por segundo día consecutivo, miembros de la delincuencia organizada lanzaron una granada contra una corporación policiaca de Nuevo León, ahora contra el municipio de Cadereyta.
El atentado ocurrió pasadas las 20:00 horas del domingo, cuando hombres armados que se desplazaban en una camioneta lanzaron el artefacto explosivo contra las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública de Cadereyta, municipio ubicado a menos de 37 kilómetros al oriente de Monterrey.
El reporte preliminar detalló que el artefacto explosivo estalló a las afueras de la corporación, provocando únicamente daños en varios vehículos que estaban estacionados afuera de la sede policiaca.
Minutos después, sicarios que se desplazaba en un vehículo ejecutaron a Carlos Gil Villalobos, un agente de Tránsito del Municipio de Apodaca, quien murió a bordo de su patrulla por los disparos de armas de grueso calibre.
A lo largo del 2010 se registraron más de 45 atentados contra corporaciones policiacas de Nuevo León, en los cuales se usaron granadas, fusiles de asalto y hasta un coche bomba.
Las agresiones de la delincuencia organizada contra los cuerpos de seguridad, federales y estatales durante el año pasado dejaron como saldo más de 70 efectivos caídos, entre ellos varios policías federales y un militar.
Atacan con granadas a policías en NL
El atentado ocurrió pasadas las 20:00 horas del domingo, cuando hombres armados que se desplazaban en una camioneta lanzaron el artefacto explosivo contra las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública de Cadereyta, municipio ubicado a menos de 37 kilómetros al oriente de Monterrey.
El reporte preliminar detalló que el artefacto explosivo estalló a las afueras de la corporación, provocando únicamente daños en varios vehículos que estaban estacionados afuera de la sede policiaca.
Minutos después, sicarios que se desplazaba en un vehículo ejecutaron a Carlos Gil Villalobos, un agente de Tránsito del Municipio de Apodaca, quien murió a bordo de su patrulla por los disparos de armas de grueso calibre.
A lo largo del 2010 se registraron más de 45 atentados contra corporaciones policiacas de Nuevo León, en los cuales se usaron granadas, fusiles de asalto y hasta un coche bomba.
Las agresiones de la delincuencia organizada contra los cuerpos de seguridad, federales y estatales durante el año pasado dejaron como saldo más de 70 efectivos caídos, entre ellos varios policías federales y un militar.