Nogaleros y el narco, tras protestas en La Boquilla
El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador acusó que tras el conflicto de agua en Chihuahua hay una red de intereses políticos, una familia de nogaleros y un presunto integrante de la delincuencia organizada por el control del líquido.
En la conferencia de prensa del titular del Ejecutivo, el subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía Berdeja, dijo que esos grupos están detrás de la toma violenta de la presa La Boquilla, las agresiones a la Guardia Nacional y el incumplimiento en el acuerdo internacional de agua con Estados Unidos.
El funcionario de Seguridad dijo que la familia Urionabarrenechea, productores nogaleros, ligada al ex gobernador César Duarte, acapara el agua en la región ya que tienen negocios de producción de nuez.
Señaló que ocho usuarios de esa familia acaparan el 12.5% de la deuda total de agua y una persona acapara el 4% del adeudo total. Mencionó que hay otro grupo denominado “Los cebolleros”, ligado al diputado local Jesús Valenciano, quien le dio un ultimátum a la Guardia Nacional.
Dijo que esos mismos actores están relacionados con otros negocios relacionados con el agua desde 2019 cuando se puso en marcha una planta tratadora con recursos estatales por 60 millones.
Además de Carlos Cuevas Abundis, detenido por el asesinato de dos de sus escoltas, vinculado a la delincuencia organizada con el cártel del Pacífico y el huachicol.
“Hay una red de políticos acaparadores de agua y presuntamente delincuentes a toda esta trama, no es un movimiento espontáneo porque no ha habido falta de agua, ha habido siempre flujo y lo que vemos atrás de toda esta embestida de la Guardia Nacional es que quieren seguir manejando este tipo de negocios, este tipo de usufructo de agua en detrimento de la nación y del país poniendo en riesgo un tratado internacional”, dijo.