Octubre 7, 2016 / ElChiltepin > Internacional

Obama declara estado de emergencia por el huracán Matthew

Los estado de Florida, Georgia y Carolina del Sur amanecieron hoy en estado de emergencia por el azote del huracán Matthew en la costa sureste del país, con vientos máximos sostenidos de 195 kilómetros por hora.

 

El presidente estadunidense Barack Obama extendió poco antes de la medianoche la declaratoria de emergencia al estado de Georgia “para evitar una catástrofe”, luego que en el curso del día lo había hecho primero con Florida y después con Carolina del Sur.

 

Los condados cubiertos por la declaratoria son Appling, Atkinson, Bacon, Brantley, Bryan, Bulloch, Burke, Camden, Candler, Charlton, Chatham, Clinch, Coffee, Echols, Effingham, Emanuel, Evans, Glynn, Jeff Davis, Jenkins, Liberty, Long, McIntosh, Pierce, Screven, Tattnall, Toombs, Treutlen, Ware y Wayne.

 

La Administración Federal del Manejo de Emergencias (FEMA) coordinará los esfuerzos de alivio a damnificados y ayudará en las labores de rescate a las autoridades locales.

 

Por separado, el gobernador de Georgia, Nathan Deal, hizo obligatoria la evacuación de más de 500 mil residentes en los seis condados costeros de Chatham, Bryan, Liberty, McIntosh, Glynn y Camden.

 

Las declaratorias de emergencia en Florida, Georgia y Carolina del Sur permitirá al gobierno federal asignar recursos extraordinarios, adicionales a los equipos de rescate y abastos que se movieron anticipadamente.

 

En Florida los condados cubiertos por la declaratoria son Baker, Brevard, Broward, Citrus, Clay, Duval, Flagler, Glades, Hendry, Hernando, Highlands, Indian River, Lake, Marion, Martin, Miami-Dade, Monroe, Nassau, Okeechobee, Orange, Osceola, Palm Beach, Polk, Putnam, Seminole, St. Johns, St. Lucie, y Volusia.

 

FEMA quedó así autorizada para identificar y movilizar todos los recursos necesarios para aliviar el impacto de Matthew en las comunidades locales.

 

Desde antes de la llegada del huracán, Obama hizo un llamado a los residentes en zonas costeras a acatar las recomendaciones de las autoridades estatales sobre eventuales deportaciones.