Empresario mexicano traficaba cocaína a Estados Unidos
WASHINGTON – El Departamento del Tesoro de Estados Unidos designó al ciudadano mexicano Francisco Javier Gastélum Serrano y a la empresa de andamiajes en la Ciudad de México, Andamios Dalmine S.A., como Narcotraficante Especialmente Designado, de conformidad con la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros del Narcotráfico (Kingpin Act).
Francisco Javier es presidente de Andamios Dalmine y la designación es un seguimiento a la designación de diciembre 2014 de César Gastéum Serrano miembro de cártel de Sinaloa, y tres de los hermanos de César Gastéum Serrano: Alfredo, Jaime, y Guadalupe Candelario.
Francisco Javier es el quinto hermano en la red de narcotráfico Gastélum Serrano que fue señalado por el Departamento del Tesoro.
Como resultado de esta acción, todos los bienes de los designados que estén en los Estados Unidos o en control de ciudadanos estadounidenses quedan congelados y a las personas de Estados Unidos se les prohíbe participar en transacciones comerciales con estos.
“Con la designación de hoy en contra de Francisco Javier y su empresa de andamios, otra vez vamos a interrumpir la capacidad de la red los Gastélum Serrano, una poderosa organización de tráfico de cocaína responsable de brindar apoyo al cártel de Sinaloa”, expresó el director interino de la OFAC, John E. Smith.
“Esto enfatiza nuestros incasables esfuerzos por socavar redes violentas de tráfico de narcóticos y los que les brindan apoyo”, agregó.
Francisco Javier brinda apoyo fundamental a las actividades de narcotráfico de su hermano César, un distribuidor importante de cocaína en Centroamérica para el cártel de Sinaloa que utiliza una extensa red criminal para transportar múltiples toneladas de cocaína semanalmente a través de Honduras y Guatemala, a México.
Además de supervisar los envíos de narcóticos, Francisco Javier ha sido responsable del manejo de recolección de dinero de drogas en nombre de sus hermanos.
Andamios Dalmine es una empresa a gran escala de andamiaje localizada en la Ciudad de México con trece oficinas regionales en todo el país. Los almacenes de la empresa se han utilizado para almacenar narcóticos.
Francisco Javier ha sido presidente de Andamios Dalmine desde 2004 y figura como el representante legal de Andamios Dalmine en un contrato de servicio de andamios con el estado de Jalisco.
Esta acción no hubiera sido posible sin el apoyo de la Agencia para el Control de Drogas (DEA) y el gobierno de México.
Desde junio del año 2000, más de 1,700 empresas e individuos han sido designados conforme a la Ley Kingpin por su participación en el tráfico internacional de narcóticos.
Las sanciones por violaciones a la Ley de Cabecillas fluctúan entre penas civiles de hasta 1.075 millones de dólares por cada violación a penas criminales más severas.
El castigo para directivos de empresas puede ser de hasta 30 años de prisión y multas de hasta 5 millones de dólares. Las multas criminales para empresas pueden alcanzar los 10 millones de dólares.
Otros individuos pueden enfrentar hasta 10 años de prisión y multas de conformidad con el Título 18 del Código de Estados Unidos por violación criminal de la Ley Kingpin.