Tres días de intensa actividad en el Vive Latino
Más de 220 mil personas tuvieron algo en común este fin de semana al ser parte del Vive Latino.
Al final fueron tres días de actividades en los cuales la pluralidad de géneros fue la constante.
Se disfrutó del TRI de México. Horas más tarde Los Ángeles Azules ponían a bailar a más de 30 mil asistentes.
“La verdad yo subí temblando, dije -¡ay, Dios mío!- y para cuando empezó la primer nota, toda la gente, la locura, desde arriba veíamos hacia el final lleno y empezaban con su manita”, comentó Elías Mejía, vocalista de Los Ángeles Azules.
Del otro lado, en el escenario principal Fobia, también hizo historia. Menos latinos, pero muy entregados al público estuvieron los australianos de Tame Impala.
Y el cierre de sábado correspondió a la esperada banda británica Blur.
El último día subió su temperatura con el rebelde del acordeón en escena Celso Piña.
Siguió la energía de Panteón Rococó, viejos conocidos del festival.
“Tomamos al Vive Latino como una prueba anual, una prueba para todas las bandas de rock, es un termómetro donde nos damos cuenta qué tanto nos hemos acercado a la gente, y creo que está prueba ha sido pasada por Panteón Rococó, la verdad es un festival que impone”, dijo Dario Espinosa, bajista de Panteón Rococó.
Este año, el Vive Latino fortaleció sus foros alternos con algunas variantes.
“Ahorita el Vive, digamos, da este espacio y me parece que a parte de los escenarios que naturalmente tienen, esto le da algo de sorpresa, algo de espontaneidad”, expresó Juan de Dios Balbi, promotor musical.
El momento que quedará en la memoria colectiva corresponde a unos de los consentidos, Los Fabulosos Cadillacs.