Querétaro 0-0 Atlas, perro que ladra no muerde
Atlas se salió con la suya ante un Querétaro que lejos está de ponerle nervio a la lucha por no descender.. Tomás Boy planteó un partido trabado, ríspido y al final se llevó un empate que más allá de darle un punto, mantiene la ventaja de nueve unidades que tiene en los últimos lugares de la Tabla Porcentual.
En esta ocasión el coraje no fue suficiente y Gallos Blancos apenas generaron un par de jugadas que le pusieron un poco de nervio al arco rojinegro, pero la realidad indica que de no dar un giro de 360 grados, el fútbol de Primera División en Querétaro tiene sólo nueve partidos por delante.
El tiempo de compensación entregó las llegadas más importantes con un centro de Brizuela que el arquero García alcanzó a tapar antes de que Bravo la empujara y luego un disparo de Marco Jiménez que Pinto rechazó con un gran lance.
Fueron 45 minutos iniciales en los que la pelota sufrió. El trato que le dieron Gallos Blancos y Atlas no fue digno de un juego de Primera División con un equipo que simplemente no tiene con qué, y otro que apeló a su ventaja de nueve puntos para defenderse y provocar un partido con carencia de futbol.
Fueron dos aproximaciones, porque estuvieron lejos de ser llegadas de peligro, las que se presentaron en el primer tiempo. Un error de Cufré que Wilberto Cosme intentó aprovechar, pero su disparo se fue por encima de la cabaña de Miguel Pinto.
La segunda aproximación fue generada por el propio guardameta rojinegro al medir mal una pelota elevada que dejó caer en su área chica y que la defensa visitante despejó con muchos apuros.
Así se diluyó el primer tiempo, mientras que la intensidad salió del lado queretano para el complemento ante la carencia de futbol que refleja la realidad de ambos equipos en las últimas posiciones de la Tabla Porcentual.
El ajedrez comenzó entonces. Un desaparecido Landín fue sustituido por Amaury Escoto, mientras el "Jefe" Boy sacó a Edson Rivera y Guillermo Martín para darle cabida a Vuoso y Ponce con la encomienda de aplacar la intensidad emplumada.
El equipo de Ambríz hallaba la profundidad requerida, el juego por las bandas desapareció y el coraje sólo alcanzó para un disparo lejano de Diego de la Torre que Pinto tapó en dos tiempos ante la amenaza de Cosme.
El Director Técnico de Gallos decidió poner todo su arsenal en el campo y mandó al colombiano Omar Vásquez, además del "Tripa" Pérez, pero nada resolvieron para dejar un triste empate a cero