Emanuel Villa reservó un doblete de color azul para esta noche. El delantero de Tigres consiguió los dos tantos con los que Tigres derrotó a domicilio a Cruz Azul 2-1 y de paso le quitó el invicto en el Estadio Azul.

 

Tigres sigue marcando el latido del Clausura 2013, con 18 goles a favor, seis triunfos y el líder de goleo en la persona de Emanuel Villa se han apoderado de la cima de la Tabla General a costa de los celestes.

 

Fue un duelo en el que impusieron su garra en los primeros minutos y con eso bastó para encarrilar el triunfo ante una Máquina que parece haber perdido el rumbo pues no gana desde la Jornada 4, antes de que Javier Aquino se fuera al Villarreal.

 

Apenas habían transcurrido seis minutos cuando Luis Perea cometió falta afuera del área a Villa.

 

Lucas Lobos se perfiló y disparó colocado al ángulo, sólo que el esférico golpeó el travesaño y llegó a los pies de Villa, quien la empujó para el 1-0.

 

El delantero ni celebró el primer gol ante su ex equipo, pues durante su etapa con Pumas no pudo convertirles, y se limitó a esperar los abrazos de sus compañeros.

 

El segundo tanto llegó de una jugada similar. Damián Álvarez dejó sembrado a Gerardo Flores por la banda derecha, cuando llegaba Perea al relevo, el chileno disparó con potencia y obligó a Jesús Corona a rechazar.

 

El rechace le cayó de nueva cuenta al “Tito” que empujó y desató la locura de la porra de Tigres que en su mayoría llegó a bordo de 10 camiones para presenciar el duelo en el Azul.

 

Desde la banca celeste, Memo Vázquez buscó replantear el parado táctico de sus pupilos y cambió a línea de cuatro defensas y cuatro medios con Christian Giménez como enganche en el segundo tiempo.

 

Para adaptar el esquema, Memo ordenó el ingreso de Pablo Barrera, quien volvió a disputar un partido de liga cinco meses después de recuperarse de una rotura de ligamentos de la rodilla derecha.

 

Fue así como encontraron el tanto del descuento al 59’ porque el Chaco Giménez se llevó a su marcador dentro del área y definió con un disparo cruzado para el 2-1.

 

Gracias a este planteamiento, la Máquina retomó el control del esférico y aunque seguía sin generar el peligro necesario para empatar, al menos ya no permitía que el visitante se adueñara de la posesión.

 

Con nada que perder, Javier Orozco también recibió la orden de apoyar en la delantera para buscar el tanto que rescatara el invicto del equipo cementero en casa.  Al 81’ “Chuletita” se lanzó una chilena que olía a gol pero el esférico pegó increíblemente en la espalda de Nicolás Bertolo y se perdió la opción.

 

Tigres dio dos zarpazos a la Máquina y la descarriló en casa, todo de la mano del que una vez fue ídolo de Cruz Azul, Emanuel “Tito” Villa que ahora disfruta de las mieles de la victoria con los felinos.