La fotografía del Gobernador Alfonso Durazo Montaño con el exgobernador Eduardo Bours Castelo, causo sensación en la clase política sonorense, como en política nada es casualidad, no pude evitar recordar el viejo proverbio árabe: “El enemigo de mi enemigo es mi amigo”.

Pero éste encuentro va más allá de viejas rencillas que podrían ser comunes a ambos, también hay que ver el sur de Sonora, desde Guaymas hasta Huatabampo, pasando por Cajeme y Navojoa, requiere un nuevo modelo de operación política ante los acotados liderazgos que dirigen los destinos municipales y que a querer y no, han abierto una franja de inconformidad entre la población por las incontables muestras de incompetencia para atender las demandas sociales y los vistosos ejemplos de corrupción, sin duda que sumar fuerzas y nuevas tácticas, permitirá a MORENA mantener el control político de la región.

En este escenario, no hay que olvidar que antes del encuentro se habían visto en redes sociales una fotografía de los ex gobernadores Samuel Ocaña García y Manlio Fabio Beltrones Rivera juntos y para cerrar con broche de oro, una de la ex gobernadora Claudia Pavlovich Arellano con el ídolo actual mexicano en el mundial de Qatar: el portero Memo Ochoa.

El Gobernador Durazo ha centrado su discurso en construir un Sonora para todos y no para unos cuantos, en política eso es acabar con el monopolio de un grupo económico que desde la política dominó el aparato estatal en las últimas décadas, exceptuando siempre el sexenio del exgobernador Bours, siempre así lo ha aclarado el Gobernador Alfonso Durazo.

Así que caballerosidad y nobleza política obliga, por ello, el exgobernador Eduardo Bours emite declaraciones donde defenestra a los gobernadores que le sucedieron y pondera las habilidades del Gobernador Durazo Montaño. Bien dicen que amor con amor se paga y con decisión política el Gobernador Durazo se deja ver públicamente con el exgobernador Bours. Antes ya se habían reunido en el rancho de Bours junto a con otros empresarios, solo que ahora fue programado hacerlo público. 

Los árabes, quienes desarrollaron con su genialidad matemática el axioma político, también lo consideraban una de las estrategias políticas más peligrosa, resumiéndola en: “los enemigos de mi enemigos son mis amigos” y la consecuencia es que lo importante a la hora de establecer alianzas, apoyos o tomas de postura no es ni los aspectos ideológicos, programáticos o fácticos, sino su ser en referencia con el archienemigo.

Pero también siempre recomendaban estar muy atentos a la debilidad que se genera al “ayudar” al enemigo de tu enemigo", ya que se puede engrandecer a alguien que también puede ser, en un futuro, tu enemigo. Por algo los romanos decían que ellos no pagaban a traidores.

Sin duda que en el futuro veremos las consecuencias de estas alianzas políticas, si de lo coyuntural trascienden a políticas públicas exitosas, ya que el exgobernador Bours en sus declaraciones está presentando recetas para resolver el problema de la inseguridad pública, hoy por hoy uno de los flancos más débiles del gobierno actual.

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