Por Javier Quintero

 

No había hablado acerca del presupuesto que recibirán los partidos políticos en 2018, quizá porque es un tema que cada año me decepciona.

 

El proceso electoral que iniciará el 8 de septiembre requiere de muchísimo dinero y ese dinero por supuesto sale de las arcas públicas. Estamos hablando de 6 mil 778 millones para los partidos políticos y los candidatos independientes y otros 5 mil 130 millones para los institutos electorales de los estados.

 

Son casi 12 mil millones de pesos para enfrentar unas elecciones que, en teoría, deberían fortalecer la democracia, motivando a la gente a que vaya por sí misma a votar, a participar con ganas; sin embargo, cada vez que hay elecciones nos queda claro que esto no es así, que la democracia en México cuesta caro y que no sirve de mucho.

 

Les decía que estas cifras exorbitantes me decepcionan. Son carretadas de dinero que no le están sirviendo a la democracia. Tan sólo veamos los porcentajes de participación en las urnas, que apenas alcanzan la mitad de los votantes, mientras el resto prefiere no participar porque también están decepcionados.

 

Vemos gobernantes que prometen y no cumplen, legisladores cuyos nombres y rostros son desconocidos para el grueso de la población, funcionarios que roban, alcaldes que mienten y privatizan los servicios públicos, gobiernos que no gobiernan. Todos ellos desmotivan a la gente, que prefiere quedarse en casa el domingo para no salir a votar. Entonces, insisto, son 12 mil millones de pesos que no empujarán la democracia porque simple y sencillamente no hay demócratas.

 

No digo que se les deje de dar dinero público a los institutos electorales y a los partidos políticos, pero sí que se les reduzca. Comprendo que si vivimos en una democracia, debe ser una parte de nuestros recursos económicos la que se asigne para su fortalecimiento.

 

Sin embargo, en un país con 20 millones de pobres que ahora mismo están pensando cómo hacerle para comer, en un país donde apenas se destinan 120 millones de pesos para el combate de las adicciones y en donde se le ha recortado el 60 por ciento el presupuesto al deporte, resulta insultante esa cantidad de dinero tirada a la basura.

 

 

*El autor es un comunicador originario de Sonora, becario de la Fundación Prensa y Democracia. Estudió Escritura Creativa en la Universidad Complutense de Madrid. Ha sido reportero, editor y director en periódicos, radios y medios digitales. Twitter: @quintero_javier